Maurice Philippe, diseñador de este Tyrrell 012 Boomerang, tenía en mente que un ala convencional no podía hacer mucho con el ancho máximo dado por la FIA, entonces se propuso maximizar el área de superficie, dentro del espacio disponible.

Como no podía, simplemente, ensanchar el ala, la dobló en un punto que se parecía a un ala delta. En teoría, se suponía que esto crearía un ala más grande con más superficie, lo que a su vez generaría más carga aerodinámica sin exceder el límite de ancho máximo exigido.
Fijó el dispositivo de aspecto peculiar en su lugar con dos grandes laterales y un tercer soporte que se conectaba al diferencial trasero y un aleron más pequeño apollado en la parte trasera del motor Ford Cosworth DFV. El resultado final fue una máquina increíblemente angular. Sin embargo ¿funcionaría realmente?

Tyrrell entregó el automóvil, en gran parte experimental, a su mejor piloto, la estrella en ascenso italiana Michele Alboreto. Alboreto sabía cómo vencer al resto de la parrilla con motores turbo. Michele Alboreto partió con el Boomerang para el Gran Premio de Austria de la Temporada 1983 de Fórmula 1, y fue además también utilizado en la Temporada 1984. Correctamente, completó algunas vueltas con relativa facilidad, mostrando que el ala de la era espacial funcionaba, al menos tan bien como un modelo normal.

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